El falso profeta: caña y cola

“Y el SEÑOR cortará de Israel cabeza y cola, ramo y caña en un mismo día. El viejo y venerable de rostro es la cabeza; el profeta que enseña mentira, éste es cola” (Isaías 9, 14-15)

El falso profeta es cola y caña. El falso profeta es como la caña y por eso Jesús dijo que Juan el Bautista no lo era (cf. Mateo 11, 7). La caña es débil, se quiebra, se mueve por “cualquier viento de doctrina” (Efesios 4, 14).

El profeta falso es la cola, porque sigue a los poderosos, va detrás de ellos: trata de acomodarse al gusto de los nobles.